Las empresas deben vigilarlos
El Correo de Andalucía. 20/08/2009
La Delegación Provincial de Cultura en Sevilla señaló ayer que las dos intervenciones que se están llevando a cabo en las obras de la ronda de circunvalación SE-40 en relación a los restos arqueológicos, a la altura de Alcalá de Guadaíra y Dos Hermanas, respectivamente, se ciñen “a la más estricta legalidad”.
En medio de la polémica originada porque el PP habla de falta de protección de estos vestigios, e incluso de expolio, Cultura informó ayer en un comunicado de que ambas intervenciones son de carácter preventivo y que consisten en controles de movimientos de tierras. En cualquier caso, aclaró que las labores de vigilancia para proteger lo descubierto corresponden a las empresas responsables de las obras.
De igual modo, especificó que la de Alcalá de Guadaíra se autorizó mediante una resolución el 20 de junio de 2008, mientras que la de Dos Hermanas fue permitida a través del mismo mecanismo a partir del 8 de octubre de 2008.
En este sentido, resaltó que las autorizaciones asignaban a cada sector, además de un equipo de trabajo, un arqueólogo de la Junta de Andalucía para que supervisara el desarrollo de las intervenciones. De este modo, a través de visitas periódicas, éste se encarga de controlar el cumplimiento de la legislación, incluyendo la determinación de las medidas convenientes para la conservación preventiva del yacimiento arqueológico y de los materiales que se hallasen.
En todo caso, Cultura aclaró que las dos intervenciones continúan todavía, por lo que no se pueden dictaminar “medidas definitivas para su conservación” hasta que no concluyan los trabajos sobre el terreno. Para ello, los arqueólogos responsables de cada yacimiento arqueológico deberán elaborar las memorias preliminares de los trabajos ejecutados y remitirlas a Cultura, que será la encargada, “tras realizar un detallado y profundo estudio de estos documentos”, de establecerlas.
respuesta. Con estas manifestaciones, Cultura quiso salir al paso de las últimas informaciones vertidas por el PP, en las que se hablaba de un presunto expolio de los restos arqueológicos hallados y de diferentes medidas de conservación y puesta en valor de los mismos.
En la misma línea, desde Cultura insistieron en que son unas intervenciones que siguen los más estrictos controles mientras se ejecuta la SE-40, la mayor infraestructura que demanda el área metropolitana de Sevilla.
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