Diario de Sevilla. 22/04/2010
Ignoro las verdaderas razones que el bueno de Paulino Plata pudiera tener para hacer esa escabechina en Cultura y cuánto de guerra intestina de hegemonía en este departamento de lo malagueño pudiera haber. Pero tengo muy claro que comete un grave error al quitar a Guadalupe Ruiz al frente de la Dirección General de Bienes Culturales. Guadalupe, desde el primer momento, tomó el toro por los cuernos y puso en marcha acciones encaminadas a corregir muchas deficiencias de los anteriores responsables. Me ciño al tema de los Dólmenes del Aljarafe, y especialmente al de Montelirio, en Castilleja de Guzmán, por el que tantos defensores del patrimonio veníamos clamando desde hace varios años, ante connivente de la ex delegada, Maribel Montaño, y del ex director general Julián Martínez García. Cuando la comunidad científica y defensores del patrimonio lo dábamos todo por perdido en esta batalla, llegó al cargo Guadalupe Ruiz y puso orden y firme a tanta pillería, y ahí está el resultado: Montelirio se salvó de ser enclaustrado entre un centro comercial y un geriátrico y se impulsó su excavación, aún sin culminar. Por eso no me explico, o quizás sea esa la explicación, de por qué mi amigo Paulino ha prescindido de Guadalupe.
Manuel R. Duarte. Valencina de la Concepción
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