 En el centro del expositor del Museo Arqueológico se puede apreciar el ídolo antropomorfo de Valencina. [Ver más fotos] |
Para contextualizar la pieza, el profesor Víctor Hurtado hizo un repaso por los ídolos prehistóricos, caracterizando los distintos tipos de representaciones y el ámbito en el que se concibieron. En ese sentido, no es de extrañar que los primeros pobladores, muy dependientes de la agricultura, tuvieran entre sus ajuares, piezas que simbolizaban la feminidad y por ende a la fertilidad.
Justo al final del Neolítico, comienza la abstracción en las representaciones, con dibujos geométricos y figuras esquemáticas de rasgos muy marcados. Entre ellos, podemos observar por ejemplo el ídolo placa de Valencina, realizado en pizarra. En general, suelen aparecer en las tumbas y sobre todo en el Alentejo portugués.Poco se conoce de estos ídolos, salvo que dado que tienen dos agujeros practicados en la parte superior deducimos que se llevarían colgados durante el ritual funerario, para luego depositarlos sobre el cuerpo del difunto, que es como aparecen regularmente. Pero entonces, ¿fomaría parte de un traje funerario? ¿Qué significan las marcas sobre su superficie? Los ojos parece ser que son la representación de la divinidad, asumida desde un culto a los astros que se verían simbolizados en los óculos que suelen repetirse en los ídolos.
Más allá de estas teorías, nos podemos encontrar con otras hipótesis muy sugerentes acerca de la simbología que rodea a los ídolos, como las que se desarrollan en el la publicación “Heráldica para los muertos”, donde se afirma que la mitad inferior de los ídolos placa representaba al clan familiar, como rasgo identitario, distinguiéndose cada generación en función del número de bandas de triángulos que aparecerían dibujadas.
Sin embargo, pronto surgiría otro elemento, el ídolo cilíndrico, donde aparecen una serie de líneas en zig zag que representarían una especie de peinado muy elaborado. Este tipo de ídolos serían una representación de la misma divinidad o ideología, pero con esquematismos distintos.Ahora se hacen en mármol, y aparecen en contexto habitacional, en las cabañas, siendo muy común encontrarlos en el sudoeste peninsular con distintas representaciones y distribuciones estilísticas en función del territorio en el que se localicen: Extremadura, Algarve, Valle del Gudalquivir y Tierra de Barros.
La siguiente figura en la que nos detendremos, el ídolo antropomórfico de Valencina, es el objeto de la Pieza del mes del Museo Arqueológico, y simboliza el esplendor de toda una cultura. De entrada, hay ciertos rasgos que llaman la atención, como por ejemplo la ausencia de boca, dado que la divinidad no se comunica, algo muy común en el ámbito Mediterráneo.
Sobre el sexo, se trata de una de las primeras representaciones de figuras masculinas, si bien en principio, se decía de este tipo de ídolos que eran todos femeninos. En La Pijotilla por ejemplo se pudieron distinguir distintas figuras masculinas y femeninas, como también sucede en Malagón. Este hecho es llamativo por cuanto evidencia cómo los líderes pudieron introducir la masculinidad en la ideología religiosa. La relación con los líderes también la podemos establecer gracias al objeto que suelen portar entre sus manos, que podría ser un bastón de mando o un hacha. Y no sólo eso, también se puede argumentar esta teoría porque aparecen en los grandes asentamientos o centros de poder, como son Valencina, La Pijotilla, Marroquíes Bajos, Malagón o Los Millares.
No obstante, Víctor Hurtado emplazó a los oyentes a asistir al próximo congreso que se celebrará en Valencina, en el mes de noviembre, donde se podrá profundizar con más detenimiento en las distintas hipótesis sobre el poblado de Valencina.
Comparativas con otros ídolos antropmorfos:
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