 Exposición del tesoro del Carambolo, en el Museo Arqueológico en 2012. JESÚS MORÓN. |
10/02/2015. El Mundo.
Un informe de expertos en contra y dos informes oficiales a favor. Ése es el resultado provisional de la última partida de ajedrez entablada por el Ayuntamiento de Sevilla (PP) y la Junta de Andalucía (PSOE), ahora con el tesoro del Carambolo como tablero. Los tres informes giran en torno al proyecto liderado por Juan Ignacio Zoido para exponer el tesoro en el Ayuntamiento con motivo del cincuentenario de su adquisición. La muestra está prevista para este primer trimestre del año.
El estudio contrario es el de la Comisión de Bienes Muebles de la Junta, formada exclusivamente por especialistas, que detectó numerosos problemas en la iniciativa municipal. A juicio de estos expertos, una «sede administrativa» no es lugar para una exposición de piezas tan singulares, y, además, «no existe sostén técnico especialista en patrimonio histórico permanente y estable» en el Ayuntamiento.
El problema más grave, sin embargo, está en la seguridad: la comisión de bienes muebles de la Junta cree que en este aspecto «existen lagunas que ponen en riesgo la integridad de conjunto», y alude a informes policiales que alertan de «concentración de riesgo elevada, con motivo del valor económico incalculable de los objetos a proteger». Hay, además, una circunstancia añadida: la instalación de los palcos en la plaza de San Francisco, que reduce de forma sensible las posibilidades de evacuación en caso necesario.
Ése es el informe contrario. Los dos favorables son los emitidos por la Subdelegación del Gobierno -que garantiza el cumplimiento de las medidas de seguridad necesarias- y el Ministerio de Cultura, y ninguno de ellos llegó a manos de la comisión de expertos a tiempo de ser tenidos en cuenta para su dictamen. El alcalde ve mala fe por parte de la Junta en este hecho. La Consejería lo niega y asegura que no llegaron a tiempo de ser trasladados de los miembros de la comisión.
El documento emitido por el Ministerio es, de hecho, una autorización formal para exponer el tesoro en la Casa Consistorial. En virtud de lo establecido desde 1963, el Ayuntamiento, aunque es propietario del tesoro, está obligado a pedir permiso a la Dirección General de Bienes Culturales para cualquier traslado. El Ministerio otorga la autorización para la muestra y señala que su decisión viene respaldada por sendos informes del Servicio de Seguridad de Museos Estatales y de la Abogacía del Estado (ambos fechados el pasado 2 de febrero).
La autorización queda condicionada al «cumplimiento estricto» por parte del Ayuntamiento de las exigencias de seguridad, conservación y transporte de las piezas establecidas por su depositario, el Museo Arqueológico. También obliga al Ayuntamiento a suscribir una póliza de seguro que cubra los riesgos de transporte, permanencia en la exposición y regreso al museo.
Zoido recordó ayer que el tesoro se ha expuesto fuera del Museo Arqueológico en varias ocasiones, como sucedió en 1990 en el Pabellón de Fibes, en 1992 en el Alcázar, en 2000 en Cajasol o en 2014 en el Metropolitan de Nueva York.
«He querido huir de toda politización de este asunto y de cualquier vinculación que se pueda hacer, y sólo les puedo asegurar que en 2015, no porque se hayan adelantado las elecciones, sino porque se cumplen 50 años de la adquisición de tesoro por parte del Ayuntamiento, habíamos decido hace un año que lo queríamos exponer cuando volviera de Nueva York, y ha sido otra persona quien ha decidido adelantar las elecciones», dijo Zoido.
El consejero de Cultura, Luciano Alonso, por su parte, señaló que su departamento respetará los informes técnicos que desaconsejan exponer el Tesoro del Carambolo en el Ayuntamiento y ofreció a éste la posibilidad de que se sufrague entre ambas administraciones la instalación en el Museo Arqueológico, que es «su sitio natural». El consejero dijo que «no es la primera vez» que ocurre algo similar, puesto que Alfredo Sánchez Monteseirín, también hizo esta petición.
No hay comentarios:
Publicar un comentario