La Red de Espacios Culturales de Andalucía (RECA) ofrece una programación de visitas en diversos enclaves de la provincia de Sevilla.
Giralda Información. 31/03/2010
La Consejería de Cultura, a través de la Red de Espacios Culturales de Andalucía (RECA), promueve visitas al Yacimiento Arqueológico de Manigua (Villanueva del Río y Minas) y al Dolmen de la Pastora y Matarrubilla (Valencina de la Concepción).
La guía RECA integra los conjuntos y enclaves, públicos o privados, que están inscritos en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz y que, por su relevancia, requieren de una adecuada puesta en valor y difusión entre el público, según informa la Junta en un comunicado.
Se trata de lugares de gran valor, "imprescindibles para conocer a fondo las huellas del pasado y descubrir los pormenores de nuestra historia".
Constituyen una fuente de riqueza, por lo que la Consejería de Cultura marca como objetivo primordial su divulgación para el conocimiento y disfrute de la ciudadanía, así como garantías de protección.
Yacimiento Arqueológico de Munigua
La ciudad romana de Munigua, también conocida como Mulva, se asienta sobre un antiguo poblado ibérico, cuyos primeros momentos de habitación se fechan en torno al siglo IV a.C. y cuya principal actividad debió estar relacionada con la metalurgia del hierro. En época de Augusto, la ciudad vinculó al nuevo poder, mediante un contrato de patronazgo, conservándose una tessera de hospitalidad, documento a través del que conocemos el nombre de la ciudad.
Desde mediados del siglo I d. C. hasta finales del siglo II d.C. es la época de mayor florecimiento de la ciudad, que inicia una importante actividad edilicia a partir de Nerón, principios de época flavia, momento en el que se comienza la construcción del Santuario de las Terrazas, el foro y la parte baja de la ciudad.
Dolmen de la Pastora y Matarrubilla
En Valencina de la Concepción (Sevilla) se localiza un yacimiento prehistórico considerado como verdadero centro capital durante el III milenio antes de nuestra Era. En el enclave calcolítico resalta la singularidad de algunas construcciones de la necrópolis que se conocen desde finales del siglo XIX y principios del XX. Se trata de grandes monumentos rodeados de estructuras menores de similar tipología que dibujan un paisaje funerario en parte todavía conservado en esta zona del Aljarafe.
Dólmenes como La Pastora, Matarrubilla, Ontiveros y otros, localizados en la vecina Castilleja de Guzmán, forman un importante conjunto megalítico en cuya adecuada protección y puesta en valor se está trabajando.
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